Uno de los graves problemas que tuvo este gobierno fue la falta de gestión y como consecuencia de un gobierno formado por reinos de taifas, en los que solo se incrementaban las partidas presupuestarias, no se priorizó pensando en las personas, sino que, por contra, se despilfarró a costa de los bolsillos de los ciudadanos. Nosotros vamos a cambiar ese modelo partiendo de un presupuesto base 0 y si tenemos en cuenta los 6.000 millones que aumentó el gasto corriente y los 600 millones más de publicidad y propaganda o los 60 de los premios Max, nos va a permitir que ese dinero quede en los bolsillos de los ciudadanos de Vigo y, sobre todo, esta medida supondrá mucho para los pensionistas y para las personas con rentas más bajas.

En absoluto. Creo que es necesario que en otras administraciones tengamos responsables políticos de la ciudad de Vigo. Cuando me fui era la única directora general y no había ningún conselleiro de la ciudad. Por lo tanto, me convertí en portavoz y de algún modo defensora de los intereses de Vigo.

Yo quiero gobernar en solitario porque creo que es la forma de llevar adelante un proyecto de ciudad único en el que han participado todos los vigueses y que estoy convencida de que es el que le va a dar soluciones a los problemas de la ciudad. La otra posibilidad es volver al pacto que ya anunció Ventura Pérez Mariño (BNG-PSOE) y si tenemos en cuenta que el alcalde actual iba a hacer una política continuista tendríamos cuatro años más perdidos.

Estoy convencida. Primero porque somos los únicos que tenemos un proyecto que no es fruto de la improvisación sino de la reflexión y participación de muchas personas. Y aparte no solo sabemos lo que tenemos que hacer, también sabemos como lo tenemos que hacer. Y eso es lo que nos diferencia del resto de los grupos. El primer paso es dar un cambio profundo en el modelo de gestión municipal que se lleva a cabo ahora.

La autovía Vigo-Porriño, conocida por algunos como Vigo-Touriño, que se inauguró curva a curva en el año 93 por el responsable en aquel momento, el señor Emilio Pérez Touriño. Para mí es irrenunciable que se arregle urgentemente. Pienso que hay que mirar hacia el futuro. Mi primera rueda de prensa como candidata fue precisamente reivindicando la necesidad de arreglarla. Hoy, afortunadamente, tenemos el compromiso del ministro de Fomento de que se va a licitar urgentemente la redacción del proyecto con un trazado completamente nuevo.

Al programa que hemos elaborado durante todo un año, y que fue hecho en la calle y no en un despacho, se le buscó la viabilidad social y económica para todas y cada una de las propuestas. Por lo tanto, preferimos quedarnos incluso cortos, pero realmente cumplir integramente todo. Desgraciamente, Vigo ha sufrido demasiadas promesas incumplidas. Medidas como la firmar ante un notario se hacen casi necesarias para garantizar ese compromiso.

Algunos partidos políticos tienen interés en ocultar la mala gestión de estos últimos cuatro años, como sucede en Vigo, detrás de una catástrofe. Pero el electorado sabe que lo que va a votar es si quieren un cambio al frente de un gobierno local. Con respecto a lo del voluntariado, precisamente, a mí me encomendaron arreglar cierto deconcierto que existía. A partir de ese momento se dejó de hablar de problemas con los voluntarios. Es más, tengo que decir que trabajé sin ningún problema con todos los alcaldes afectados, independientemente del partido al que perteneciesen.

El actual gobierno dio una muestra de que lo que primó fueron los intereses partidistas en vez de los intereses de la ciudad. Mi compromiso desde el primer momento en el que acepté ser candidata fue y es defender los intereses de la ciudad antes que los intereses de mi partido.

Mi partido defiende una peatonalización racional. Lo que critica es la falta de cumplimiento por parte de este alcalde de un acuerdo plenario, en el tema de la plaza de la Independencia. Toda peatonalización debe llevar consigo un plan global de actuación en una zona. No se puede peatonalizar sin tener un plan alternativo de tráfico, de seguridad, de limpieza e iluminación. Eso es lo que se está haciendo ahora, y eso supone arruinar al pequeño y mediano comercio.